10 agosto 2013

Capítulo 4: Haciendo fotos - Parte 1

Hasta ahora ya hemos visto cosas tan importantes como la exposición y el balance de blancos, hemos profundizado en la apertura, en la velocidad de obturación y en la sensibilidad ISO.

Además, hemos visto los distintos modos de enfoque de nuestra cámara, lo que son los datos exif y que es un raw, al menos como algo mas avanzado, ya que en los capítulos anteriores os he enseñado a escoger vuestra nueva cámara junto con sus lentes y demás y a estas alturas del curso ya tendríamos que saber distinguir los distintos tipos de cámaras y tenemos que tener muy claro que no todo son megapíxeles, que los objetivos y los sensores tienen mucho que ver en la calidad de la imagen final.

Con esto tendríamos ya que tener una pequeña base sobre fotografía, y digo pequeña porque solo hemos visto la punta del iceberg y realmente en este curso veremos poco mas, aunque no por ello vamos a dejar de ver algo tan importante como es La Luz y las distintas técnicas y lenguajes fotográficos.

Hoy nos toca la luz, así que ¿os apuntáis?

En fotografía, sin luz, no hacemos nada, y si no sabemos dominarla, nuestras fotografías estarán incompletas y no serán todo lo perfectas que nos gustaría.
 
La luz se puede clasificar según su dirección, intensidad, color, etc...Vamos a ir viendo los distintos tipos de luz y cuales son sus propiedades.
 
Dirección de la luz 
 
Dependiendo desde donde ilumine el objeto la luz nos creara unos efectos u otros. Si la luz viene de frente, el objeto no tendrá sombras con lo que pierde volumen y detalles, si la luz viene de detrás destacara la silueta del objeto diferenciándolo del fondo y si viene desde arriba, abajo, o lateral, creara sombras consiguiendo destacar las texturas y dándole volumen.
 
La Dirección de la luz y la altura es el ángulo de direccionamiento de las luces hacia el modelo y tiene una importancia decisiva en el aspecto general de la fotografía. Variando la posición de la fuente, pueden resaltarse los detalles principales y ocultarse los que no interesen.
De la dirección de la luz también depende la sensación de volumen, la textura y la intensidad de los colores. Como ejemplo se puede citar que una luz dirigida de manera horizontal puede sugerir tranquilidad o ambiente de atardecer.
Aunque las posiciones de la luz respecto al motivo y la cámara, pueden ser infinitas, todas ellas pueden incluirse en mayor o menor parte en unos de los tres tipos siguientes:
  • Luz frontal: Produce aplanamiento de los objetos, aumenta la cantidad de detalles pero anula la textura. Los colores se reproducen con gran brillantez.
  • Iluminación lateral: Destaca el volumen y la profundidad de los objetos tridimensionales y resalta la textura; aunque da menor información sobre los detalles que la luz frontal y, además, aumenta el contraste de la imagen.
  • Contraluz: Convierte los motivos en siluetas lo cual puede resultar conveniente para simplificar un tema conocido y lograr su abstracción, a ello hay que añadir, además, la supresión que se consigue de los colores.
 
Intensidad de la luz 
 
Dependiendo de la intensidad de la luz también tenemos distintos efectos sobre nuestra imagen, una luz fuerte hace que se creen grandes contrastes entre las zonas iluminadas y las sombras, teniendo a veces que sacrificar los detalles o bien en las zonas iluminadas, o bien en las sombras ya que el rango dinámico de la cámara esta limitado, bastante mas que nuestro ojo. Por el contrario las luces suaves nos aseguran detalles en las luces y sombras pero a cambio de perder detalles en las texturas.
 
Cada luz tiene sus ventajas e inconvenientes, la luz dura sirve para enfatizar las texturas y las suaves para conseguir buenas iluminaciones en general.
 
Fuente de la luz 
 
Según desde donde proceda la luz varia la manera de iluminar de esta, si la luz viene de un punto, como por ejemplo el sol o un flash, será una luz direccional, creando muchas sombras, si por el contrario viene desde un difusor, como por ejemplo las nubes en un día nubado, la luz ilumina uniformemente todo el objeto, quedando casi sin sombras.
 
La luz puede provenir de fuentes naturales o artificiales, y en cada caso posee una serie de características.

La luz natural es aquella que proviene del mismo sol y es influenciada en su paso por la atmósfera terrestre, además dependienta de la hora del día puede dar diferentes matices en intensidad, dirección, dureza y color, dando por consecuencia que una luz apta para determinado trabajo tenga poca duración debido a la rotación de la tierra.
 
Una ventaja de la luz natural es que permite hacer tomas fotográficas en exteriores y puede ser complemento a la luz artificial. La luz artificial es aquella que proviene de lámparas, spots, flashes y otros objetos luminosos controlados por el fotógrafo, teniendo como ventaja el poder manipular la dirección, color e intensidad de éstas.
 
Sin embargo el uso de luz artificial resulta en un costo más caro de producción y además requiere de conocimientos técnicos para manejar las luces adecuadamente; dependienta de la cantidad de luces en uso siempre puede haber un límite de la extensión de la superficie iluminable, por lo que la luz artificial suele ser complemento de la luz natural y viceversa.
 
Temperatura de color 
 
Otro aspecto de la luz es su color, si sobre una pared blanca incide una luz roja, esta se pintara de rojo, a esto es lo que se llama la temperatura del color y se mide en grados kelvin.
 
Los tonos azules son los mas bajos de temperatura y los rojos los mas altos.
 
Hay varias maneras de controlar la temperatura del color, bien ajustándola en la cámara si disparamos en JPEG o TIFF o bien mediante nuestro editor de imágenes, en casa, si disparamos en RAW. En este último caso dependerá del programa que usemos la manera de hacerlo.
 
Si lo ajustamos en la cámara tendremos para elegir el modo manual, en el que le debemos indicar a la cámara un objeto blanco para que ella guarde la información y la procese cuando hagamos la foto.

También podemos decantarnos por uno de los programas que suelen llevar como: flash, neón, sombra, luz día, etc, dependiendo del modelo de la cámara.

¿Os acordáis del balance de blancos?, es precisamente esto.
 
Medios para controlar la luz 
 
Hasta aquí hemos visto las características de la luz, ahora vamos a ver los medios más comunes que disponemos para “domarla”.  
  • Flash: el flash es una luz que imita la luz del sol (tiene la misma temperatura de color) pero de muy corta duración, con el uso de uno o varios flashes se pueden conseguir muy buenos resultados ya que dominas la dirección e intensidad de estos.
  • Focos: en los focos al igual que los en flashes se controla la dirección e intensidad, pero además puedes ver los resultados de la iluminación ya que la luz es continua, tiene diferente temperatura de color que el flash y son menos portátiles.
  • Reflectores: son superficies que reflejan la luz, aquí vale todo, desde una pared blanca, la arena de la playa, el agua, etc...Dependiendo de la superficie si es brillante o mate, lisa o rugosa, o su color, influirá en el reflejo. En el mercado hay de todo tipo de reflectores, dorados (cálidos), plateados (fríos), blancos, etc.
  • Difusores: aquí también vale todo, una cortina, un pañuelo, las nubes, su función es suavizar y difuminar la luz al pasar a través de ellos, algunos flashes llevan incorporados difusores para suavizarlos
  • Filtros: son unas lentes que se ponen delante del objetivo para filtrar determinados rayos, o cambiar el color de la luz que hasta ellos llega, también existen filtros para crear efectos especiales

Si recordáis en el capítulo de otros accesorios os hablé por encima de los filtros, así que ahora vamos a ver los mas interesantes:
  • Ultravioletas: normalmente se usan para proteger el objetivo de arañazos, ya que es preferible que si hay un accidente se raye el filtro que cuesta poco dinero que no el objetivo. Estos filtros como su nombre indica, no dejan pasar los rayos ultravioletas, en alta montaña, que hay muchos, si que se agradecen ya que eliminan el tono azul de nuestras fotografías.
  • Polarizadores: estos filtros solo dejan pasar a la luz que tienen un tipo de onda determinado, o bien horizontal, o vertical, o diagonal, etc. El resultado es que elimina los muchos reflejos de por ejemplo el agua, los cristales de los escaparates, etc. Al eliminar estos brillos se consiguen cielos más azules oscuros y los colores de los objetos mas saturados.
  • Degradados neutros: como un nombre indica el filtro va de mas a menos, en una parte de el, el efecto es cero y en el otro extremo el máximo. Estos filtros dejan pasar más luz por un lado que por otro y sirven para igualar las diferencias de luz entre las partes de la imagen. Normalmente se usan para oscurecer los cielos, ya que estos suelen ser bastante más luminosos que la tierra, sobretodo en los días nubados o con el sol de frente.
  • Cálidos o fríos: estos filtros prácticamente han sido sustituidos por la tecnología digital, ya que es muy sencillo emular su efecto en el ordenador dándote más control sobre la intensidad de filtro que se aplica. Lo que hacen es darle a la imagen tonos cálidos o fríos, o corregir dominantes según el color del filtro utilizado. 
 
Tipos de Luz
 
Una iluminación básica consiste en el uso de tres luces: principal, relleno y contra.
  • Luz Principal: es la fuente más potente, la de más intensidad y fija la colocación de las demás.
  • Luz de Relleno: suele situarse al lado contrario de la luz principal y sirve para disimular las sombras producidas por la luz principal.
  • Luz de Contra: crea un halo detrás del elemento a fotografiar y ayuda a darle volumen separándolo del fondo. 

Difusión de la Luz
Determina la nitidez del borde de las sombras y, por tanto, la dureza o suavidad de la imagen. La luz dura produce, en general, efectos fuertes y espectaculares, mientras que la suave resta importancia a las sombras y hace que sea el volumen del motivo el que domine sobre las líneas.
Ambos tipos de iluminación están determinados por el tamaño y proximidad de la fuente luminosa.
 
La luz dura procede de fuentes pequeñas y alejadas, como el sol y las bombillas o flashes directos. La distancia y el tamaño determinan el grado de dureza. La luz dura es idónea para destacar la textura, la forma y el color; y proporciona el mayor grado de contraste.
La iluminación semidifusa procede de fuentes más grandes y próximas al objeto y, aunque produce sombras definidas, ya no tienen los bordes nítidos. La luz semidifusa destaca el volumen y la textura, pero sin sombras negras y vacías y sin el elevado contraste de la luz dura. El color resulta más apagado.
La luz suave es muy difusa y no proyecta apenas sombras. La fuente luminosa ha de ser muy extensa como un cielo cubierto, o rebotarse sobre una superficie muy grande y próxima, como el techo, pantallas, lienzos, etc. Esta iluminación es la menos espectacular de todas pero la más agradable y fácil de controlar. El control del contraste, uno de los principales problemas con que se enfrenta el profesional, queda perfectamente resuelto con este tipo de luz.
Al medio día todos los rayos refractan por igual y la luz aparece blanca. Las moléculas del aire dispersan parte de la luz y por ello vemos el cielo azul.
Al atardecer, el sol debe atravesar un capa más gruesa de aire; El extremo rojo del espectro es el que sufre una mayor refracción, y, por tanto, los atardeceres son rojizos. La intensidad de la luz como factor determinante del color, es únicamente una ilusión óptica debida a la peculiar fisiología de nuestra retina.

El Color

Viene determinado por la longitud de onda de la luz y por el color intrínseco del objeto.
 
El color es una parte importante del registro fotográfico ya que usualmente le da un sentido dramático a la fotografía y puede provocar distintas expresiones o estados de ánimo dependiendo de lo que el fotógrafo quiera manifestar por medio de ella.

Ejemplos de iluminaciones
Dependiendo de la iluminación que le demos a una imagen resaltaremos u ocultaremos sus detalles, por ejemplo si queremos mostrar un rostro de una chica hermosa procuraremos usar una luz suave y difusa para no resaltar las impurezas o arrugas de su rostro. La mejor iluminación seria usar una luz principal lateral suave y difusa, como por ejemplo una ventana con cortinas o un flash con difusor y otra mas suave en el lado opuesto de menor intensidad para aclarar un poco las sombras (flash esclavo o un difusor). Esto seria lo principal, luego dependiendo de nuestro gusto podemos añadir otra luz para iluminar el fondo, hacerle un contraluz, etc.
 
Si por el contrario lo que queremos es resaltar el paso de los años y la aspereza de la piel debemos usar una luz lateral fuerte y direccional para crear sombras que las resalten, aquí también dependiendo de nuestro gusto usaremos una luz muy suave para aclarar un poco las sombras o un panel negro para absorber la luz y crear las sombras mas resaltadas.
Si estamos al aire libre y es un día soleado a una hora central del día la cámara no podrá recoger detalles en las luces y en las sombras, dependiendo de la situación habrá que usar unas cosas u otras. Para iluminar personas, objetos, etc se puede usar el flash de relleno o reflectores también se pueden usar difusores para que la luz sea más suave. Si lo que queremos es igualar la luz del cielo con la tierra, usaremos un filtro degradado neutro, para sacar cielos más oscuros y saturados usaremos un filtro polarizador, las combinaciones son muchas.
 

Si, ya se que todo esto es un tostón, pero es necesario conocer el comportamiento de la luz, no es lo mismo colocar un flash en la zapata de la cámara o disparar el que tenemos justo al lado del objetivo que ponerlo a un lado junto con un difusor, lo primero nos va a dar una luz muy dura, mientras que lo segundo nos dará algo mas suave. Dependiendo del mensaje que queramos dar con esa fotografía así tendremos que colocar nuestros esquemas de luz.

Además, no os penséis que si vuestra cámara no tiene la opción de colocar un flash externo no podréis usarlos, porque no es así, la gran mayoría de flashes tienen lo que se llama disparo por "simpatía" y no es que se lleve bien con todos los flashes, si no que cuando detectan un disparo de luz proveniente de otro flash estos se activan y emiten luz.

El tema de la luz es realmente complicado ya que no se trata de ir poniendo luces y ya, para nada, solo como aperitivo os diré que hay que sumar luces, para ello tendremos que ajustar la potencia de cada flash dependiendo de lo que queramos sacar.

y solo para terminar, no os asustéis al usar el flash en pleno día, muchas veces es indispensable, sobretodo para fotografía macro e incluso para retratos, ya que podremos eliminar sombras muy molestas y resaltar mas los detalles que queremos. Por otro lado tened mucho cuidado cuando la luz esté detrás de vosotros, ya que podréis sacar vuestra propia sombra y nuca, salvo que es lo que deseéis en esa fotografía, nuca os pongáis entre la luz y el objeto que estéis fotografiando ya que saldrá tapado por vuestra sombra.

No os preocupéis si esto os suena a chino, lo único que tenéis que hacer es practicar y practicar, y veréis como poco a poco vais teniendo resultados.

Pues nada, en el próximo artículo os enseñaré a conseguir fotos con mas acutancia, ups, perdón, nitidez, aunque esté mal dicho. ¡Hasta la próxima!
 
 

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